Pocos lugares han involucionado tanto en La Habana Vieja. A pesar de su exquisita restauración –arquitectónicamente hablando– el Museo de Ron, es probablemente la más fatal de las intervenciones de Habaguanex en el caso histórico de la ciudad.
Remontémonos un par de décadas atrás –tal vez tres– y entremos en la Casa del joven Creador; institución que acogía cada sábado en la noche conciertos de los más valiosos jóvenes músicos y trovadores de aquel entonces. Gente como Santiago Feliú, Frank Delgado o Gerardo Alfonso llenaron de música, risas y ligues ese mismo patio. No pocas veces quedé fuera por no haber capacidad en el local, no pocas veces me fui a casa ronco de tanto cantar. Y no hablemos de los conciertos de Pedro Luis Ferrer...
De vuelta a la actualidad, pido permiso al empleado con cara de seguroso, para tirar las fotos que aquí pueden ver. Le hablé de aquello hace 30 años, de aquella época... ¿Qué clase de mierda negrón?... los ochenta... yo venía aquí también. Esa fue la mejor época de este lugar... pero no hay más na´ asere.
Si quiere ver una pantomima de cómo se hace el Ron a través de maquetas espantosas a media luz o saborear un trago a precio exorbitante en un bar lleno de turistas despistados mientras los cubanos pasan por la acera sin hacerte el más mínimo "Swing", déjate caer por este lugar, pero después no te quejes.
No sé si fue por la añoranza pero ese Ron, al menos a mí, me supo aguado.
Este es uno de los nuevos artículos sobre lugares de Cuba que he ido acumulando en mi nuevo proyecto de Mapa Interactivo de Cuba; Havanagraffiti. Una especie de Andar La Habana online, pero desde el punto de vista del cubano de pie, para decir lo que diría el cubano dentro de una guagua.
¿Por qué este proyecto?
Hace un tiempo, buscando el teléfono y dirección de un Hospital en La Habana, me di cuenta de que Cuba –la verdadera- no existe en la Web. Encontré un pedazo por aquí, otro por allá, todo edulcorado.
Por eso, y porque soy arquitecto y conozco mi país y mi ciudad, me di a la tarea de crear una Web para poner a Cuba –la que padecí- en el Mapa, creando un lugar interactivo con todos los lugares (incluso los que no recogen las guías turísticas), listados en categorías y organizados en mapas de TODAS las ciudades cubanas y sobre todo darle voz también a quienes la sufrimos, a quienes la amamos y odiamos al mismo tiempo.
Para toda esa gente como yo es Havanagraffiti, para poner a Cuba en el Mapa.
