Mentiras verdaderas
Bambú Press

El 17 de enero de 1998, hace diez años, el semanario Newsweek reveló que el presidente William Clinton no sólo era aficionado al saxofón; también se distendía en el Salón Oval de la Casa Blanca con las destrezas bucales de Mónica Lewinsky, una rolliza y traviesa becaria de 23 años. Pocos días después, The Washington Post describía en su primera plana los jugueteos del presidente, transformándolos en una morbosa cuestión de Estado que mezclaba moral, sexo y poder.
Clinton rindió testimonio y negó los hechos. Los republicanos dispararon con toda la munición gruesa de su arsenal puritano, el Congreso amenazó con destituirlo, un fiscal lo acusó de once delitos y mencionó la posibilidad de un impeachment (impedimento). Un año después fue cuestionado y juzgado, pero ya no por adúltero, sino por "mentiroso".

Curiosamente, mucho menos escándalo ha causado una minuciosa investigación del Centro para la Integridad Pública, de Washington, que revela que el presidente George W. Bush y miembros de su gabinete mintieron 935 veces en un lapso de dos años, en el periodo previo a la invasión a Irak.

"Bush y siete de los más altos funcionarios de su gobierno metódicamente propagaron información errónea a partir del 11 de septiembre de 2001", con el objetivo de lograr apoyo para el ataque que en marzo de 2003 derrocó al dictador Sadam Husein.
El presidente hizo 260 declaraciones falsas al referirse a las supuestas armas de destrucción masiva de Irak y a los presuntos vínculos de Al Qaeda con el régimen de Bagdad, sostiene el informe del Centro de Integridad Pública, que regularmente ofrece al público estadunidense el resultado de sus investigaciones sobre ética y responsabilidad gubernamental. Las acusaciones de que el dictador iraquí poseía un arsenal de armas de destrucción masiva fueron el principal argumento usado públicamente en los parlamentos alrededor del mundo y en la ONU para justificar la invasión dirigida por Estados Unidos.

La revelación coincide con el lanzamiento del libro "Impeach the President, the case against Bush and Cheney" (Acusación al Presidente: el caso contra Bush y Cheney), publicado en Nueva York por los sociólogos Dennis Loo y Peter Phillips, profesores en universidades de California. El libro destapa historias ocultas tras las manipulaciones electorales de 2000 y 2004, las trágicas fallas en el manejo de las consecuencias del huracán Katrina en 2005, el espionaje ilegal a ciudadanos e, incluso, mentiras vinculadas la destrucción ambiental.


Roberto Bardini
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